5a.calle 5-18 zona 1
Guatemala, ciudad
Tel. 22321785
Precio: Q. 110.00
lunes, 15 de julio de 2013
COMO NUBES EN LA HIERBA, y nuestras vidas aquel momento............José Duchez
Como nubes en la hierba y nuestras vidas aquel momento, narra la salvaje educación sentimental de un joven al que pareciera no interesarle el convulso ritmo de la ciudad de Guatemala a finales de los años 80 y que, en cambio, se sustrae en la contemplación a distancia de la vida de los demás. Hasta que esas vidas, hasta entonces un elemento más del paisaje, empiezan a ser su propia vida.
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Historias para ser contadas
ResponderEliminarSe hace difícil encontrar historias dignas de mi tiempo. Hoy es la excepción. En este mundo donde los libros se imprimen menos y se digitaliza más, es sumamente valioso contar con obras que atrapan al lector desde la primera letra hasta el punto final. La literatura guatemalteca se ha llenado de novelistas que buscan impactar (sin éxito) con historias trilladas, rebuscadas y retorcidas. Personajes tan complejos e incomprensibles como las mismas obras, en las que cada página se hace más pesada que la anterior. Hoy es la excepción.
Como nubes en la hierba y nuestras vidas aquel momento nos lleva por una trama llena de emociones, sentimientos y sueños. Presenta la historia de Juan, un adolescente que busca la forma de revelarse y rebelarse del mundo y de sus padres; es muchacho que adquiere madurez a cada cambio de página. Es notable la evolución del personaje quien no se queda como estático espectador de la historia. A lo largo de la novela se presentan hilos conductores que se entrelazan con el protagonista para culminar con un final lleno de melancolía y esperanza, tristeza y expectativa. Una vida tocada por el destino. Las obras bien logradas como ésta no son escritas por los autores, son ellas las que lo escriben a él. Sin embargo, tiene un inconveniente.
Esta novela está llena de detalles. Cada escenario es perfectamente moldeado con letras y creado en la mente del espectador. La habilidad de trasladar espacios de la imaginación del escritor al papel es magistral, como si estuviera allí, como si pintara el paisaje. No es una descripción barroca que confunde. En esta su primera novela, José Manuel Duchez graba en la imaginación un lugar que existe en cualquier rincón de Guatemala: montañas llenas de paz, colmadas de naturaleza y mantos verdes que cambian con el paso del viento. Esos lugares donde el cielo tiene color de cielo y el agua sabor a agua. Donde en el aire se entremezcla el dulce de las flores y la robustez de los árboles, donde la humedad tiene un matiz blanco que envuelve el follaje en la alborada. No es difícil situarse en tiempo y lugar. Sin embargo, tiene un inconveniente.
Este debut literario del autor representa un reto para él. No para cautivar al lector. Es para vencer al negocio de las letras que muchas veces termina por desmotivar a los artistas, quienes no se aventuran a una segunda publicación. La labor tesonera de Duchez en promocionar su libro es tan intensa como la trama misma. Este es un valor agregado que no tienen otros escritores, quienes se sientan para ver cómo las editoriales hacen el trabajo por ellos. En esta primera prueba, José Manuel Duchez presenta una novela bien trabajada, bien lograda y con un buen argumento.
El único inconveniente de la obra, es que se acaba.
Por Ricardo Gandara